El escaparate de la tienda Cocodisk se convirtió el sábado, 17 de febrero, en escenario musical con la actuación del grupo Selene para la ruta de Vermú de Arriba Abajo

En Huesca en particular y España en general nos gusta la hora del vermú y más en fin de semana. Es una afición muy extendida sobre todo si va acompañada de unos buenos rayos de sol, y si además se le suma música a la ecuación la cosa suena pero que mucho mejor. Y efectivamente la propuesta desde el Bar La Estrella de la ruta de Vermú de Arriba Abajo ha sido todo un acierto y la gente ha respondido muy favorablemente.

las selene huesca

Una diversidad generacional de público que quiso unirse desde el primero que se hizo a principios de febrero en La Zarza con sesión de Ibo y Bosque pinchadiscos, pasando después por La Estrella con Mr Pendejo dj y Javimar, hasta llegar el pasado sábado hasta Cocodisk para escuchar a las Selene en formato acústico y formato reducido, se podría añadir.

Una tercera parada de la ruta y esta vez en un establecimiento comercial, la emblemática tienda de discos Cocodisk, que dejaba hueco en su escaparate a estas cuatro mujeres para exhibir su talento y arte a través de la música y del cristal y llegar hasta el público que se congregaba en la calle atento a lo que sucedía tras éste mientras disfrutaba de un buen vermú.

Esta formación integrada por cinco mujeres, en esta ocasión con la ausencia de su bajista, lleva más de una década dando guerra y ganándose al público en cada uno de sus conciertos. Con la gran naturalidad y complicidad que las caracteriza tocaron su repertorio esta vez en un formato acústico y más pop-folk donde sonaron temas como Amazonas, Violeta al cielo, La nieta del diablo… y algunas versiones que nunca defraudan como la de No sé qué hacer con mi vida donde ‘Selene es de color de luna’ se escuchaba alto y claro, o Me gusta ser una zorra, está ultima elegida para los bises y como broche final.las selene huescaA esta banda se la quiere por lo que es y por lo que representa. Sus melodías y su fuerza unidas a sus letras reivindicativas y feministas son su gran apuesta, junto a unas actuaciones que no defraudan gracias a una propuesta honesta pero sobre todo por sus ganas de disfrutar y de que disfrutemos con ellas.

La compañía de Virginia a la voz y guitarra, Lucía a los coros y viola, María a la guitarra y Julia al cajón resultó muy acertada para pasar un agradable y soleado sábado de vermú entre amigos.

La próxima e última cita con este ciclo de Vermú de Arriba Abajo será con el concierto de Tritón Jiménez en la Librería Anónima. Después con la llegada de marzo pondremos nuestras ilusiones en más vermús musicales. Puede que este escaparate de música en vivo anime a otros establecimientos a repetir la experiencia… Veremos qué pasa.