Seis meses después de ponerlo en marcha, el Álbum de Huesca toma forma con imágenes que van desde el siglo XIX, desde que existe la fotografía, hasta la actualidad. Más de 125 imágenes que hacen un viaje en el tiempo por los recuerdos de los habitantes de la provincia.
Albumdehuesca.es está ideado desde el programa Visiona de la DPH y el colectivo En vez de nada está en permanente crecimiento y todas las fotos son bienvenidas. La web ha recibido 8.000 visitas desde su comienzo y hoy una de las participantes, Alegría Lacoma, invitaba a buscar en los archivos la foto más
preciada, como ella lo ha hecho con una imagen de los hortelanos de Huesca.
En la actualidad se suben a Internet cerca de 2 millones de fotos cada día. Redes sociales, webs, blogs… existen multitud de formatos que dan salida a esa vorágine de información visual en el que se vive, un mundo casi saturado por la imagen que ve menguado su valor y su capacidad de impacto ante un espectador que ya no sabe hacia dónde mirar. ¿Qué ocurriría si en vez de tener la opción de publicar cientos de fotos para contar una historia, tuviéramos solo una? Una única foto para recordar, para emocionar y, sobre todo, para transmitir.
Eso es lo que busca el Álbum de Huesca, una iniciativa muy original ideada por el programa Visiona de la DPH y el colectivo oscense En vez de nada que está consiguiendo crear entre todos un álbum colectivo que ayude, a través de las historias personales de sus habitantes, a recuperar la memoria de la provincia. Así lo ha contado el director de Visiona, Pedro Vicente, quien sostiene que “no necesariamente tiene que ser la mejor fotografía, no necesariamente tiene que ser la fotografía más valiosa, sino esa que más signifique para cada persona”.
La selección no es nada fácil y, afirman, puede llevar hasta meses bucear en ese mar de recuerdos hasta dar con la fotografía indicada. Alegría Lacoma, una de las participantes que confiesa tener debilidad por la conservación de los archivos fotográficos, ha contado hoy cómo eligió esa foto, cuenta que en su casa hay miles de fotos, de todos los soportes, pero que enseguida vio que había pocas fotos de huertas, “le eché un vistazo a las diapositivas de mi padre y dije esta”.
Su imagen se puede ver en albumdehuesca.es con el título Un Hortelano de Huesca. “¿Cómo seleccionar entre miles? ¿Qué criterio seguir? A mí todos los criterios me parecen buenos, pero al final tienes que encontrar una foto que defina la memoria, que tenga que ver con la familia y
que sea muy especial”, explicaba esta oscense.
Este álbum emocional de la provincia se puso en marcha el pasado diciembre y acumula más de 125 fotografías y casi 8.000 visitas en la web. Sin embargo, sus creadores no quieren que decaiga y animan a seguir participando. Pedro Vicente recuerda que “es un proyecto vivo y esperamos que tenga un largo recorrido El álbum ha tomado forma, se puede decir que ha habido una catalogación después de todas las imágenes que hasta ahora han querido compartir.
El proyecto está en continua evolución, no solo porque el álbum sea cada vez más grande sino porque desde hoy ofrece muchas más formas de acercarse a esta galería de recuerdos, como
si fuera un túnel del tiempo. Uno de los responsables de la asociación En vez de nada, Orencio Boix, detalla las variables desde la que se puede explorar este archivo, las fotos se pueden ver por orden de llegada, pero también en una línea del tiempo, por décadas y también se ha diseñado un mapa para saber dónde han sido tomadas. En cada imagen el propio donante cuenta la historia que hay tras ella y, además, lleva ligado un concepto que mejor la define. En el apartado de archivo conceptual se puede ver la cantidad de fotos que responden a una misma idea, como apunta Boix “esto nos da una idea de qué es lo más preciado para la gente. Si nos fijamos, los conceptos que más se repiten son la familia, la amistad, los recuerdos…, pero también hay de política”, añade.
María José Hasta y Javier Aquilué, compañeros de Boix en este colectivo, se centran en la parte más creativa del proyecto porque, dicen, “no tiene porqué terminar con la elección de la foto”. El apartado Miradas es un espacio en el que la gente puede aportar su aportación personal sobre las fotos, de una forma artística, ya sea a través de la pintura, el dibujo o la literatura, contando lo que ve desde su propia perspectiva.
Así es cómo se está creando esta panorámica sentimental de la provincia confeccionada por sus protagonistas que sigue abierto a la participación. De hecho, hoy se ha comentado que hay un vacío en fotografías de la década de los años 20 para animar a seguir buscando la foto más preciada vinculada a los altoaragoneses o a su historia.