Arizona Baby
Sala El Veintiuno
28 de mayo de 2016
Imágenes: Muerdelaespina Fotografía
¡Qué ganas tenía de un buen concierto de rock and roll! Y sí, como dicen en sus conciertos, “Somos Arizona Baby y vosotros, también” porque un concierto no es sólo lo que pasa en el escenario, es lo que pasa también entre el público, el clima que se crea, la interacción entre las dos partes y las sensaciones que confluyen arriba y abajo. Y cuando esto sucede, es porque algún planeta se ha alineado con otro o porque está en el escenario una banda como Arizona Baby. Y acabas el concierto pensando qué diablos ha pasado aquí y necesitas un par de cervezas más para canalizar emociones y poder entender qué ha sucedido.
Pero vamos a analizar cómo empezó todo, porque los miembros Arizona Baby no subieron al escenario nada contentos. Lo primero que hizo su cantante, Javier Vielba, (aka El Meister), fue mostrar su molestia por las horas a las que empezaban por culpa del partido de fútbol de la final de la Champions. Pero si ellos tenían ganas de empezar, quienes estábamos abajo aún teníamos más. Un solo de batería dio el pistoletazo de salida al concierto con Owners of the world, una canción con una letra que pone los pies en la tierra. Y con ella, ellos también tocaron tierra y se metieron de lleno en el concierto. Sonido arizónico 100% con un maestro del slide como es el guitarrista Rubén Marrón (aka Sr. Marrón). Pero si alguien cree que Arizona Baby son solo una banda de roots rock, se confunde por completo. Además, del rock, el blues y el folk se colaron también unas cuantas influencias musicales, como la psicodelia de la Costa Oeste californiana, el dark punk o el pop. Todas estas influencias confieren un sonido único y personal a esta banda vallisoletana.
Y poco a poco, la máquina empezó a engrasarse y al grito de “Somos Arizona Baby y nos gusta”, se empezaron a gustar y el público comenzó a responder, gracias a la música pero también a la simpatía de Vielba, siempre acompañado en sus palabras de la guitarra del Sr. Marrón. El concierto fue creciendo en intensidad y en entrega por ambas partes. Directo impecable y ,con eso, no me refiero a que suenan como un disco o que no se equivocan ni una sola vez, sino que en directo suenan muy bien pero, a la vez, en el escenario hay actitud y buen hacer, sin postureos y sin performances. Es un espectáculo desnudo de esnobismos, egos y demás tonterías que, a veces, se ven en el indie patrio.
Arizona Baby es un trío formado por dos guitarras acústicas y una batería. Hay que destacar la dificultad de tener dos instrumentos iguales y que se diferencien, consiguiendo mantener el interés, lo que exige gran virtuosismo y coordinación. También la mezcla de voces de Vielba y el baterista Guillermo Aragón es magnífica. Alguien pensará que a este trío, con esta combinación instrumental, le falta fuerza en su música y no es así, suenan con más potencia que bandas con muchos más instrumentos. También hacen solos de guitarra, y cómo se agradece que fluyan con naturalidad en la canción y que el público no tenga que sufrir esos solos innecesarios y estridentes con los que, en ocasiones, nos castigan algunos guitarristas. Vielba y el Sr. Marrón no necesitan demostrar con adornos y parafernalias que son grandes guitarristas. En cuanto a las intros de las canciones, sublimes, no tengo más que decir. 
El repertorio fue un recorrido por toda su discografía, además de la canción de Merle Travis, 16 Tones, tal como la popularizó José Guardiola en los años 60, para acabar con Shiralee, su canción amuleto. Todo esto pasando por el subidón con la canción If I could, que sin duda se explica mejor en el vídeo que hay a continuación.
Acaba el concierto y desde la cabina del DJ suena el Fire de Arthur Brown. Creo que la mayoría de las personas asistentes nos dimos cuenta el hecho de que éramos seres afortunados y que, en breve, podremos disfrutar, de nuevo, de un concierto de Arizona Baby. La banda volverá a tierras altoaragonesas el 2 de julio en el marco del Festival Estoesloquehay. Yo voy a repetir. Caigo en la cuenta de que Arthur Brown actuó en el Estoesloquehay celebrado en San Juan de Flumen (Sariñena) en 2009. ¿Casualidad o guiño a la parroquia? No lo sé, lo que sí que sé seguro es que yo estaré allí. Quedamos en Tardienta.