Antes de que se cierren estos siete días llenos de títeres y de todo lo relacionado con la imagen en movimiento, el Presidente de la Diputación Provincial de Huesca, Miguel Gracia, y el concejal de Cultura de Binéfar, Juan Carlos García, han hecho un primer balance durante el que han hablado “del año de la consolidación”.
El Festival afianza su apuesta por las artes escénicas en la calle y refuerza las actividades para el público más local y estudiantes con una programación que también ha tenido propuestas de performance, videocreación, cine 4D, instalaciones, pasacalles, títeres para pequeños y mayores, música, exposiciones, cine de animación, circo y el mejor teatro.
El Festival de títeres e imagen en movimiento, más conocido por todos como Imaginaria, baja hoy el telón después de ofrecer cerca de cuarenta espectáculos puestos en escena en forma de circo, música o performance, pero también ha habido cine de animación, exposiciones e incluso presentación de libros, conferencias, talleres y sigue con el teatro por bandera, con reconocidas compañías entre las que han estado Teatro Silfo, El ball de Sant Vito, Eugenia Manzanera, El mar del Norte o la premiada Tresperté Circo, encargada de cerrar esta intensa semana cultural con su espectáculo Oopart.
Antes de que se inicie la temporada estival y de citas fundamentalmente musicales, es el quinto año que la primavera trae consigo un festival que “convierte a Binéfar en un gran escenario”, como lo pone de manifiesto la programación prácticamente ininterrumpida durante siete días. En la jornada de cierre, el Presidente de la Diputación Provincial de Huesca, Miguel Gracia, ha disfrutado entre el público de varias de las actividades gratuitas en la calle después de participado en un primer balance de Imaginaria, donde ha puesto el acento en “haber conseguido en muy pocas ediciones consolidarse como una referencia en el calendario cultural, por encima de todo es un festival familiar”.
Así resumía Gracia algunos de los ingredientes de este festival especializado, entre los que también ha citado el saber trabajar con profesionales del entorno inmediato, la incorporación cada año de diferentes colectivos sociales y colaboraciones locales, “algo que seguramente tiene mucho que ver en que los vecinos de Binéfar ya consideren Imaginaria como algo propio”. Con el máximo responsable de la DPH, principal soporte económico del festival, ha estado el alcalde y el concejal de Cultura de Binéfar, Alfonso Adán y Juan Carlos García, Pilar Amorós y Paco Paricio, de Los Titiriteros de Binéfar, y Lucas Fernández, de Territorio Gestión Cultural, además de Josep Antón Chauvell, presidente de la Comarca o Francisco Mateo, presidente de la Comisión de Cultura de la DPH.
Son los representantes de todas las entidades implicadas en el desarrollo de Imaginaria, fruto de un modelo de colaboración entre el Ayuntamiento de Binéfar al frente, la financiación de la Diputación Provincial y con la dirección de agentes culturales del municipio como Los Titiriteros de Binéfar y Territorio Gestión Cultural, quienes inspiraron juntos esta programación de espectáculos de títeres, pero que también acoge actividades de todo lo relacionado con la imagen en movimiento.
Para el concejal Juan Carlos García, lo más destacable de este año ha sido la respuesta del público en todos los espectáculos “de las segundas fiestas de Binéfar”, como lo ha definido hoy. Ha hablado también del año de la “consolidación” al apuntar hacia el incremento del presupuesto hecho por el consistorio y el refuerzo que ha tenido el programa entre semana “con más actividades” cuando, ha expuesto, participan más binefarenses mientras el fin de semana se reciben visitantes de localidades, comarcas y provincias limítrofes.
El edil de Cultura también ha querido destacar que el festival no quiere descuidar la formación de nuevos públicos “hemos puesto la atención en las actividades para los escolares”, tomando como un reto las “demandas e interés de los centros educativos de la localidad”. Entre las cifras que se han ofrecido al respecto, 1200 estudiantes han participado, de los que 400 han visitado también la exposición El Circo con la que se inauguró esta edición, del reconocido artista oscense Antonio Santos.
Espacios públicos convertidos en espacio cultural
Año a año Imaginaria sorprende con nuevos escenarios públicos y lugares en los que no suelen realizarse este tipo de espectáculos, así hasta llegar a los dieciséis con los que acaba esta quinta edición. Se refería Pilar Amorós, de Los Titiriteros de Binéfar y desde la dirección artística del Festival, a que “no queremos quedarnos solo programar artistas y espectáculos sino ir más allá con actividades que dejen un poso, comprometidos”, añadía.
Siguiendo en la línea que ya tuvo en su primera edición, el festival acoge actividades que versan en torno al teatro de títeres y también a las propuestas más vanguardistas que toman la imagen como forma principal de narración. Desde la dirección también ha subrayado la respuesta de la gente, “que ha sido buenísima”, tanto que se pone como ejemplo la primera selección de cortos que se realizó en la terraza de un bar y donde había público incluso viéndolo desde la calle, a través de la verja. Es una imagen que queda en la retina, en el imaginario de la gran semana cultural de Binéfar.
Entre los espectáculos que han llegado hoy a Imaginaria, la compañía La Puntual, con más de 40 años de historia titiritera a sus espaldas, ha divertido a pequeños y mayores presentado en el parque de la avenida del Pilar donde ha presentado al títere maravilla, una divertida comedia y el último estreno de la compañía catalana, ha sido después de un pasacalles con La Gran Familia Cataplín durante el que el público se ha implicado en la búsqueda de Manolo mientras se divertían con juergas tradicionales.
Por la tarde, la música de raíz argentina de Manuel Klainer y Gloria Geberovich inundó el centro de Binéfar. Fue un homenaje a esas personas, que como Gloria, han sido acogidas por la población binefarense, lo que ha permitido un rico intercambio cultural entre personas de otras partes del mundo y las gentes literanas.