De Mipanas a Morillo de Tou y Jánovas y con el arquitecto y profesor Sixto Marín como guía, se ha planteado el último recorrido de ViSiONA por diferentes experiencias en el territorio para dar visibilidad a proyectos rurales y tejes redes de colaboración entre los diferentes, desde estudios de artista, proyectos empresariales o iniciativas sociales. Este último viaje anima a adentrarse en la historia de la recuperación de tres pueblos altoaragoneses. La información y el formulario de inscripción están accesibles en www.dphuesca.es/visiona-programacion.
La última ruta del programa cultural de la DPH centrado en la despoblación llega a su final este sábado para recorrer distintas formas de recuperación de pueblos desde los años 90. De la mano del arquitecto y estudioso de este ámbito, Sixto Marín, se plantea un recorrido que comenzará en Mipanas, rescatado por una cooperativa vecinal, para seguir con la visita al centro vacacional de Morillo de Tou, a pleno rendimiento en la actualidad, y finalizar la ruta en Jánovas, población perteneciente al municipio Fiscal y decidido desde hace unos años a tener una segunda oportunidad.
Última ruta de esta edición de ViSiONA
Después de haber conocido con estas rutas de ViSiONA proyectos empresariales, pueblos de colonización, entidades sociales o estudios de artista, este fin de semana tomarán protagonismo tres historias diferentes de esfuerzo vecinal, apoyo privado o institucional que muestran ejemplos en la recuperación de esa España vaciada en los años cincuenta. La ruta saldrá de Huesca (Estación Intermodal) a las 9 horas y se regresará al mismo lugar a las 20 h. Con más de una veintena de participantes, quienes todavía quieran inscribirse pueden hacerlo a través del formulario disponible aquí o desde el correo electrónico didacticadiputaciondehuesca@gmail.com y abonar 20 euros en concepto del transporte en autobús y comida.
Alejado de una mirada nostálgica, la DPH lo ha planteado como un recorrido revitalizado por tres de las 31 intervenciones con éxito de la provincia altoaragonesa que se recogen en libro Pueblos recuperados en el Altoaragón. Un viaje con primera parada en Mipanas, uno de los pueblos más desertizados de Aragón después de que sus habitantes lo tuvieran que abandonar en la década de los sesenta a causa de la obra del embalse de El Grado y que, en 1986, renació con el empuje de sus antiguos habitantes y los nuevos repobladores. Conocer cómo se dio su transformación y qué plan urbanístico existió detrás de esta localidad del Somontano de Barbastro serán algunas de las cuestiones que el arquitecto Sixto Marín narrará en este paseo inicial para lo que se ha contado con la Asociación de vecinos de Mipanas.
Morillo de Tou
En el centro de la ruta se sitúa Morillo de Tou, afectado por el recrecimiento de Mediano y de titularidad pública fue cedido a Comisiones Obreras para ser recuperado y, a día de hoy, registra cerca de 650 visitas diarias en temporada alta, además de dar trabajo a más de 50 personas en verano y a alrededor de 20 el resto del año. En los años 90 fue convertido en centro vacacional rural mientras se reconstruían las casas que todavía estaban en pie. En la actualidad, supone un ejemplo de rendimiento económico mediante su reconversión como destino turístico.
Estas y otras cuestiones se abordarán durante la visita a este núcleo del Sobrarbe donde se contará con el gerente del centro vacacional, Pedro Arbó, quien por las principales calles del pueblo enseñará algunos de los edificios recuperados más emblemáticos, como fueron la iglesia, el cementerio o algunas casas familiares. Entorno a la historia del viejo y el nuevo Morillo, Arbó explicará la imagen renovada de un pueblo que en la actualidad cuenta con edificios de nueva construcción, rutas como el sendero botánico, proyectos de energías renovables y agricultura ecológica, además con todas las comodidades de un centro vacacional a pie de montaña.
Final de la ruta para ver Jánovas en plena recuperación
La ruta del sábado concluirá en Jánovas, situado a la ribera del río Ara y uno de los puntos que opuso mayor resistencia al desalojo en los años 80 por la construcción de un pantano que no vería la luz. Esta pequeña localidad sobrarbense ha iniciado el viaje inverso con la reversión de las propiedades a sus antiguos ocupantes, en pleno proceso de recuperación.
De esta manera, se pone el broche final al calendario de rutas que se ha desarrollado durante cuatro fines de semana desde el pasado mes de octubre con más de un centenar de participantes a los que se ha dado a conocer los proyectos y experiencias que se realizan desde el medio rural y, en ocasiones, no son suficientemente visibles.